ENTORNO = ÉXITO

Sea cual sea el proyecto que emprendas, rodéate siempre de personas que aporten valor. Pero sobre todo, y muy por encima, de personas que CREAN en ese proyecto. Que le den consideración y verdadera categoría. Personas que genuinamente vean su potencial.

Sencillamente, ellas serán las que hagan realidad tu creencia, las que pongan suelo al ÉXITO que anhelas. El resto de personas que no tengan un especial pensamiento sobre el valor o entidad de aquello que manejas, o no confíen del todo en su sentido y viabilidad, es mejor que no entren en tanto no lo ‘sientan’. Y si lo hacen, que sea de forma tangencial (para ti instrumental), sin realmente tomar una posición central en el proyecto; apenas conociendo la realidad de la que participan.

Para triunfar, primero, es cuestión de generar ENERGÍA. Hay que apelar no ya a los mejores talentos sino a las mejores VIBRACIONES, pues sólo a partir de ellas se puede dar lugar a lo diferente, a lo disruptivo, a lo nuevo.

En otras palabras, para CREAR hay que CREER. Rodéate de gente indiferente, incrédula, negativa, reactiva o escéptica y fracasarás. Da igual lo mucho que te puedan aportar. El desaliento llegará primero.

Si la idea es buena y la visión correcta, ¡busca entonces la ENERGÍA!